Rescate bajo la lluvia

Anticipando el verano, recuperamos un ventilador

Estaba tan sucio y descalabrado, que ya lo arrojaban al contenedor de basura.

Llovía bastante, estaba todo mojado. El agua hacía que se le pegara la tierra y la suciedad, formando como una capa de barro que goteaba de sus paletas.

Como no podía ser de otra manera, lo quise traer conmigo. 

Cuando lo levanté casi se me cae, no pensé que era tan pesado!

Lo metí en una bolsa que siempre llevo cuando salgo, y me fui para casa.

Increíblemente, a mi hijo le gustó apenas lo vio, y se lo reservó para restaurarlo.

No le saqué fotos porque realmente estaba asqueroso, creeme.

Motor, base, cables, paletas, todo fue cuidadosamente desatornillado, limpiado, reparado.

Lo único que no le pusimos fue el cable de tela, lo reemplazamos por un cable nuevo, ya que como funciona, y lo vamos a usar, nos pareció mejor resignar la originalidad por la seguridad.

Fijate cómo ya se para, con la cabeza erguida y "posando" para la foto en el patio de casa...

Es todo un artista!

Cuando lo vi ya listo, supe dónde colocarlo. Sobre el vajillero, que en realidad guarda libros (hay tantos en casa que ya no sabemos dónde ponerlos).

Por un rato se posó sobre la cómoda que recuperé para Luciano, pero luego volvió a su lugar.

Y me mira desde esa altura, me saluda, brilla.

Sabe que tiene para mucho rato con nosotros.

Y me voy a lo de Marcela, vamos, acompañame, vas a ver cuántas creativas comparten sus trabajos en este finde frugal.
Besos mil, hasta la semana que viene!